Comienza la Semana Santa y miles de turistas se encuentran ya en territorio Oaxaqueño, a pesar del temor que hay en muchos, aun así, se atrevieron a llegar a nuestra entidad, principalmente a los diferentes destinos de playa, en donde según las noticias que se escuchan en todo el país, son los lugares más inseguros, al menos esa es la fama que tiene en este momento nuestra entidad, algo con lo cual no estoy del todo de acuerdo.
Pues si bien es cierto que los índices delictivos han aumentado en los últimos tres meses, también lo es el hecho de que, para estas fiestas de semana santa o mejor dicho para esta temporada vacacional, todas las policías estatales, municipales coordinadas con la guardia nacional, tienena cargo la seguridad en todo el estado, por lo que pienso que los miles de turistas podrán disfrutar una buena temporada de descanso en Oaxaca.
Donde las cosas están de cabeza es el la capital del estado, pues las autoridades municipales que encabeza el contador Francisco Martínez Neri, de plano no pueden con el paquete, para empezar el turista llega a la capital del estado y lo que ve es basura por todos lados y si se le ocurre visitar la central de Abasto, el olor a basura y desperdicios es impresionante, pues el gigantesco basurero que tiene instalado la CATEN sobre las riberas del Atoyac sigue creciendo, a pesar de que se incendió la semana pasada.
Los múltiples problemas que enfrenta desde el inicio de su administración, no le permiten al contador Martínez Neri concentrarse en los asuntos importantes de la ciudadanía, por ello la percepción que tiene la población en cuanto a seguridad es muy mala y vaya que tienen razón, los asaltos a mano armada están a la orden del dia en cualquier parte de la ciudad y no se diga en las colonias, porque ahí si las cosas están descontroladas.
El presidente municipal enfrenta una serie de irregularidades entre los miembros del cabildo, como lo es el robo descarado de vehículos del encierro municipal, en donde los responsables aun no son detenidos y según se comenta hicieron una pequeña fortuna, también hay indicios que en otros corralones están desmantelando autos pequeños y están desapareciendo motocicletas.
El problema del ambulantaje está a todo lo que da, por todo el centro histórico hay vendedores ambulantes casi encima del turismo, es más, en estos días ni siquiera se puede caminar por algunas calles de la verde Antequera debido a los comerciantes que dicen tener permiso para vender sus mercancías, pues sus lideres ya se arreglaron con las autoridades municipales.
A lo anterior hay que añadirle que muchos de los propietarios de los diferentes restaurantes, terrazas y demás lugares donde se expenden alimentos, de la noche a la mañana aumentaron desproporcionadamente sus precios, aprovechándose del vacío de autoridad que hay en la capital del estado, de esta manera el turismo no solo está a merced de posibles delincuentes, sino hasta los prestadores de servicios turísticos están tratando de timarlos.
En síntesis podemos decir que será un verdadero viacrucis para muchos turistas, pasar unos días en la verde Antequera, deben estar muy alertas si es que no quieren irse con un mal sabor de boca de Oaxaca…..Sígame en Twitter como @visionpolitica7