Unas de cal por las de UNAS DE CAL POR LAS DE ARENAS
POR ALFREDO ARENAS CASAS
– Sin duda la 4T topó con la Iglesia Católica y sin duda esta saldrá raspada, porque no es fácil enfrentar a todo un pueblo católico, siempre habrá consecuencias y ya se están viendo luego de los desafortunados asesinatos de 2 sacerdotes jesuitas, esa fue la gota que derramo el vaso de la paciencia, tolerancia y confianza en las autoridades federales de nuestro país y urgió una respuesta fuerte y rápida de parte de las autoridades eclesiásticas, más que respuestas a los señalamientos y criticas del Presidente de López Obrador, que más que condenar los crímenes de los sacerdotes, se lanzo en contra de la Iglesia Católica por haber supuestamente guardado silencio ante otras atrocidades cometidas en los gobiernos anteriores, solo le aclararon que ellos, los sacerdotes y autoridades eclesiásticas, siempre han alzado la voz ante las injusticias, convocando después al pueblo católico a celebrar una Jornada de oración por la paz, contra la violencia y la Inseguridad que priva en nuestro país.
Desde el domingo 3 de Julio hasta el domingo 31 del mismo mes, todas las eucaristías serán ofrecidas por los asesinatos de los 2 sacerdotes jesuitas y demás sacerdotes masacrados por la delincuencia organizada y por todos los católicos que han sido asesinados en México que suman miles, las misas del domingo 31 serán ofrecidas por los mismos sicarios “para que cambien su forma de vida”.
Se estará pidiendo también por los miles de ciudadanos que han tenido que salir de sus pueblos de origen donde los grupos criminales se han asentado obligándolos a dispersarse por el miedo a la inseguridad en el resto del país, teniendo que abandonar todas sus pertenecías, sin que nadie les haga justicia hasta ahora.
La Iglesia Católica dejo muy en claro en las misas del Domingo y hoy Lunes que “donde no hay justicia no puede haber paz”. El llamado enérgico de los sacerdotes oficiantes, fue para las autoridades federales, estatales y municipales que se encuentran cruzados de brazos ante lo que sucede en gran parte del país.
Como católicos practicantes, oremos por la paz para que esta pesadilla termine cuanto antes.