En la protesta, los quejosos denunciaron supuesto hostigamiento y extorsión por parte de los militares y de la policía estatal.
Los inconformes se negaron a dar declaraciones. Sin embargo, en las pancartas que portaban se leía: “Fuera policías corruptos”; “No más Ejército” y “Fuera Gobierno”.
El bloqueo provocó que autobuses de turistas y camiones de carga pesada quedaran varados durante horas.
Tras una hora de bloqueo, el lugar fue resguardado por al menos 30 policías estatales con equipo anti motín, que permaneció a metros de la protesta.
Los manifestantes retiraron el bloqueo a las 18:19 horas, luego de que se les notificó que, de continuar con el cierre de la vía federal, se les desalojaría.
El pasado 13 de mayo, comerciantes y transportistas colapsaron durante seis horas las calles y avenidas del puerto bajo la misma consigna.
En esa ocasión, el Gobierno del Estado aseguró que los bloqueos se debieron en respuesta a un enfrentamiento entre militares y policías comunitarios de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), el decomiso de tres armas de uso exclusivo del Ejército y el aseguramiento de cien mil pesos en efectivo a la misma organización.